Para que nos hagamos una idea sobre aquello de lo que estamos hablando, vamos a estudiar una de las aportaciones de la filosofía de la ciencia que ha marcado la forma de entender el conocimiento científico.
El pensador de la imagen se llama Karl Popper. Sus aportaciones en el estudio del funcionamiento de la ciencia y de la razón humana han sido determinantes. Su teoría, denominada Falsacionismo (Racionalismo Crítico) viene a decirnos que la ciencia no es una forma de alcanzar verdades, sino de descubrir falsedades.
Como podéis imaginar, el cambio es importante. Su análisis lógico de la inducción, le llevó a rechazar definitivamente la concepción clásica que teníamos del conocimiento científico y que se resume así: "observando la realidad, la ciencia induce leyes universales que son el conocimiento científico en si mismo". Explicado con un ejemplo tendríamos que gracias a la observación de muchos cuervos negros, la ciencia llega a la conclusión (inducción) de que "todos los cuervos son negros".
Esta forma común de entender el conocimiento científico, empezó a ser problemática con un filósofo llamado Hume que demostró que ese mecanismo de la inducción (observación ------>ley universal) es un error. De la observación de muchos cuervos negros, nunca podremos llegar a la seguridad de que todos los cuervos son negros.
Cuando se profundizó en el análisis de esta cuestión, se llegó a la conclusión de que así era. La VERDAD científica dejó de ser absoluta para pasar a ser simple probabilidad. La misma historia de la ciencia demuestra que teorías que se tienen en una época como absolutamente ciertas, acaban siendo sustituidas por otras antes o después. No tenemos acceso, concluye Popper, a la verdad. Solo podemos ir acercándonos poco a poco a ella, descartando viejas teorías científicas por otras nuevas, y con el convencimiento absoluto de que serán a su vez sustituidas por otras nuevas según vaya avanzando el conocimiento.
Parece un poco absurdo...¿no?..., lo cierto es que gracias a él y a otros muchos filósofos hoy sabemos mucho más de la ciencia lo que nos permite situarla en el lugar que corresponde.
Aunque seguiremos profundizando en la filosofía de la ciencia, baste ahora esta introducción para comprender qué significa el caracter crítico de la filosofía.